La Argentina en Copa Davis – 1934-1959

Presencia argentina con altibajos

En las siguientes dos temporadas (1934-35), Argentina no participó y los otros países de la zona no tuvieron una gran actuación: en 1934 Brasil venció a Perú por walk over y luego no viajó para dirimir con los Estados Unidos la Final Interzonas; en 1935, Brasil derrotó a Uruguay 3-2 y perdió nuevamente la definición interzonal con los Estados Unidos por no presentación.

El regreso se produjo en 1936, cuando se derogó la Zona Sudamericana. Los jugadores argentinos partieron hacia Atenas para enfrentar a Grecia en la segunda rueda de la Zona Europea. Ganaron por 4-1 (con Zappa y Del Castillo, que actuó como capitán-jugador). acompañados por Carlos Alberto Menditeguy, jugador de Primera División del Buenos Aires LTC y destacadísimo deportista, para sumar experiencia aunque no ofició de jugador suplente. El punto griego lo dio Lazaros Stalios, que sorprendió a Zappa en tres sets seguidos.

Los mismos tenistas viajaron hacia Berlín para la tercera rueda, entre el 5 y el 7 de junio, y hasta allí llegaron: Alemania Federal, poderosa por el aporte de Gottfried von Cramm, se quedó con la victoria por 4-1. El punto lo obtuvo Zappa contra Hemult Denker en cinco sets (3-6, 6-0, 2-6, 6-1 y 6-1) y Del Castillo le ganó un set a Von Cramm (6-0, 4-6, 6-4 y 6-1), quien oscilaba entre el puesto uno y dos del mundo. Corresponde destacar una digna actitud de los dos aficionados argentinos: al no poder reunir la Asociación Argentina de Lawn Tennis los fondos para pagar los pasajes, los cubrieron de su propio peculio. Esa derrota marcó la despedida del certamen por varios años, pues luego de no presentar equipo entre 1937 y 1939, la Copa Davis no se disputó por la Segunda Guerra Mundial (1940-1945) y tampoco se logró enviar una comitiva en 1946 y 1947.

Pasados 12 años, Argentina intervino en la Zona Europea de 1948, directamente en segunda ronda. En Bruselas, el equipo compuesto por tres debutantes, Heraldo Weiss, Enrique Morea y Alejo Russell -que fue capitán y jugador- no pudo con Bélgica a pesar de presentar una fuerte resistencia: luego de ceder los dos primeros singles, Morea y Russell ganaron el doble contra Jacques Peten y Philippe Washer en cuatro sets y Morea igualó la serie venciendo a Peten 10-8 en el quinto. La definición favorable a los locales la logró Washer contra Weiss por 8-6, 4-6, 6-4 y 6-4. Inmediatamente se produjo otra corta ausencia de tres temporadas: en 1949 no se presentó el equipo nacional para jugar con Egipto (walk over), a fines de abril, y no se inscribieron en 1950 y 1951.

En 1952 el equipo conformado por Enrique Morea, Alejo Russell, Salvador Soriano y HeraldoWeiss viajó a Lausanne, Suiza, con algunos problemas en las designaciones. Es que Weiss ya se encontraba con síntomas importantes de una enfermedad incurable y fue incluido por sugerencia de su esposa, Mary Terán, quien deseaba acompañarlo en la que posiblemente sería su última actuación dentro del tenis de elite. El presidente de la AALT, Heriberto Dodds, accedió y Weiss se sumó a la delegación, aunque sólo actuó como capitán, sin disputar partidos. Lamentablemente, falleció a su regreso, el 30 de agosto. La serie con los suizos fue por la segunda ronda de la Zona Europea y el representativo nacional ganó con facilidad por 5-0, entre el 17 y el 19 de mayo. Apenas cedieron dos sets: Max Albrecht le arrebató uno a Russell y Jost Spitzer otro a Soriano. En la tercera rueda de la misma zona, Francia los detuvo ajustadamente, en el estadio Roland Garros entre el 13 y el 15 de junio: Morea consiguió sus dos singles -venció primero a Bernard Destremau y después a Paul Remy- pero Russell cayó en los dos individuales y también en el doble junto a Morea, contra Remy y Robert Abdesselam. El equipo galo fue secundado por el técnico francés Martin Pláa, que también trabajó varias veces como entrenador en la Argentina.

Nuevo paréntesis entre 1953 y 1954 hasta que en 1955 se cumplió una actuación parecida a la anterior, con una victoria contra Mónaco de 3-2, en el principado (Morea, Russell y Ernesto della Paolera, quien no llegó a jugar pero acompañó como suplente, capitaneados por Juan Nash). Los puntos del domingo no se llevaron a cabo porque las autoridades locales no accedieron a cambiar el horario, adelantando los encuentros, para que Morea pudiera viajar a Italia donde debía jugar el tradicional torneo romano. Finalmente el argentino optó por abandonar el match y ceder los dos puntos de Russell contra Yvan Medecin y de Morea contra Georges Pasquier. Una quincena más tarde, Francia se volvió a cruzar en el camino argentino y ganó por 3-2 en París. Morea fue quien aportó también los dos parciales venciendo a Robert Haillet y a Paul Remy, ambos en sets seguidos, pero Russell no pudo con sus individuales y, en el doble, Remy y Marcel Bernard derrotaron a Morea y Russell por 6-4, 6-3 y 6-4.

Como era ya una constante, no se participó otros dos años (1956 y 1957) y por fin se reactivó la Zona Americana. Entre el 11 y el 13 de julio de 1958 las Indias Británicas Occidentales (una efímera asociación de colonias británicas del Caribe que tuvo lugar entre 1958 y 1962) cedieron por 5-0 en el Buenos Aires Lawn Tennis Club, siendo la segunda vez que una serie de Copa Davis se disputó en esa institución. Defendieron los colores nacionales Eduardo Soriano, Enrique Morea (capitán-jugador), Alejo Russell y Ernesto Ríos en su debut. Para Russell fue su última Copa Davis, con 41 años y 312 días, convirtiéndose en el argentino de mayor edad en representar al país en esta competencia hasta el cierre de esta obra. Ganó el doble junto a Soriano contra Peter Valdez y Peter Phillips (de 24 y 19 años respectivamente) por 6-1, 6-3 y 6-4. Antes, Soriano venció a Valdez con autoridad por 6-2, 7-5 y 6-1 -apenas tuvo un set point en contra en el segundo- y Morea a Phillips en sólo 45 minutos de juego, por 6-2, 6-2 y 6-2.

Muchos criticaron la inclusión de Russell por su edad, pero se desenvolvió con soltura y no desentonó en absoluto. Luego del doble, que terminó muy rápido, se ofreció una exhibición a cargo de Nora Somoza y Roberto Aubone contra Graciela Lombardi y Alejandro Echagüe, con triunfo de los primeros por 5-7, 7-5 y 6-2. En el último encuentro del domingo se incluyó a Ríos, un rosarino que se lució con su ataque y también ganó en tres sets, por 6-3, 6-4 y 6-3, contra Phillips. La siguiente semana (del 18 al 20 de julio del ’58) fue el turno de Israel, en las semifinales zonales, que también perdió con los locales por 5-0 en el mismo escenario frente a los lagos de Palermo. A pesar de la falta de competencia de Morea -hacía más de seis meses que no jugaba en forma oficial- su calidad y presencia desconcertó a ambos rivales, Arieh Avidam y Eleazar Davidman (un joven de 21 años y 1,87 metro de estatura). Luego de los himnos nacionales en presencia del embajador del país visitante, Sr. Arieh Leon Kubovy, Eduardo Soriano ganó sus dos singles al igual que Morea y juntos también aportaron el punto de dobles contra los modestos Davidman y Avidan. Para nuestro país formaron además Alejo Russell y Ernesto della Paolera. Como era costumbre entonces, luego del doble se disputó un partido exhibición donde el brasileño José Edison Mandarino y Davidman vencieron a Roberto Aubone y Andrés Funes por 9-7, 2-6 y 6-2.

La final zonal se disputó en el Westchester Country Club de Rye, Nueva York, entre el 15 y el 18 de agosto. El sorteo lo realizó el cónsul argentino en aquella ciudad, Carlos Casal, y el capitán local, Perry Jones. Enrique Morea (capitán) y Eduardo Soriano, de 21 años, no consiguieron puntos contra los locales. La superficie utilizada fue césped, siendo la primera vez que un equipo argentino jugó sobre ella en el marco de la Copa Davis. En el primer punto, Soriano cayó en cuatro sets con Barry MacKay y en el segundo Morea suspendió en desventaja contra Hamilton Richardson (6-1 y 6-2 para el estadounidense y 5-4 para el argentino) y al reanudar el sábado ganó ese parcial por 9-7 pero cedió el cuarto por 6-2. A continuación se disputó el doble, en el que Sammy Giammalva y MacKay vencieron a Morea y Soriano por 6-3, 6-2 y 6-2, cerrando la eliminatoria que fue presenciada por 1.200 personas. Morea declaró al diario La Nación: “En dobles hay que devolver el servicio, pero nosotros no pudimos hacerlo hoy. Todavía no nos hemos adaptado a las canchas de césped. Ha ganado, sin duda, el mejor equipo y acerca de mi propia actuación diré que encontré serias dificultades para avanzar hacia la red con la celeridad necesaria”, confesó. Morea, que luego perdió con MacKay por 6-2, 6-2 y 6-2 en su último partido en Copa Davis, se quedó en Rye para disputar un torneo round robin junto al peruano Alejandro Olmedo en un equipo sudamericano. También formó oficialmente el equipo Ernesto Ríos, aunque no disputó parciales.

En 1959, si bien Argentina figuró en los cuadros, nunca llegó a jugar. Venció en la primera ronda de la Zona Americana a Venezuela por walk over y luego cedió los puntos con Cuba, en junio, pues la AAT no logró recaudar los fondos necesarios para enviar a Enrique Morea, Eduardo Soriano y Roberto Aubone, los convocados para la eliminatoria.